PROTEGE TU RED WIFI
Tu Wifi es un gran herramienta para usar internet sin limitaciones en la comodidad de tu casa. Pero lo que se suele desconocer es que también están sujetas a riesgos mismas amenazas que todos tus dipositivos.
Puede que no sean las mismas, pero sí que existen riesgos que estas redes WiFi pueden sufrir.
Puede que no sean las mismas, pero sí que existen riesgos que estas redes WiFi pueden sufrir.
- Reducción de ancho de banda. Esto depende del número de dispositivos intrusos y el uso que estén haciendo de esta red. Normalmente, esto hace que se limite la velocidad y capacidad de la red wifi.
- Robo de información. Esta es una de las amenazas más importantes, ya que una mala configuración de nuestra red puede dejarle la puerta abierta a atacantes para robarnos la información que transmitimos.
- Conexión directo. Aparte de poder robar nuestra información, también podrían conectarse directamente con nuestros dispositivos, incluyendo información sensible.
- Suplantación de IP. Al usar la red wifi con un dispositivo, este recibe un identificador IP con el que diferenciarlos del resto. Por ello, cualquier acción realizada con esta IP, busquedas, compras, mensajes, correos, se quedará registrada en la red y da igual que lo haya hecho.
Una vez conocemos todas las amenazas a las que nos enfrentamos, ¿qué podemos hacer para enfrentarnos?
Primero, asegurarnos de no usar wifi abierta. Aunque es poco probable que tu wifi sea abierta, pues estas están en desuso. No obstante, nunca viene mal revisar.
Segundo, comprobar que nuestro router no venga configurado con el sistema WEP, pues estos son muy ineficaces y casi tan inseguros como una red abierta.
El tercero viene en dos partes, pues es posible que la contraseña de tu wifi sea robusta, pero no lo suficientemente compleja, además de dejar la contraseña de serie, ya que con el tiempo se podría descifrar.
Para poder tener una contraseña segura, robusta y compleja es necesario cumplir unos requisitos; debe tener un mínimo de 16 caracteres, aunque siempre es más seguro las contraseñas largas; usar letras minúsculas y mayúsculas, números y signos especiales como ?, !, ., *, $, etc.; y cambiarla regularmente.
Otros consejos son el de usar una configuración WPA2, que es más segura que la WEP, cambiar el nombre de nuestro router por uno cualquiera, para que no se pueda deducir nuestro operador y apagarlo si nos ausentamos muchos días, para que así no puedan intentar acceder a nuestra red wifi.
Segundo, comprobar que nuestro router no venga configurado con el sistema WEP, pues estos son muy ineficaces y casi tan inseguros como una red abierta.
El tercero viene en dos partes, pues es posible que la contraseña de tu wifi sea robusta, pero no lo suficientemente compleja, además de dejar la contraseña de serie, ya que con el tiempo se podría descifrar.
Para poder tener una contraseña segura, robusta y compleja es necesario cumplir unos requisitos; debe tener un mínimo de 16 caracteres, aunque siempre es más seguro las contraseñas largas; usar letras minúsculas y mayúsculas, números y signos especiales como ?, !, ., *, $, etc.; y cambiarla regularmente.
Otros consejos son el de usar una configuración WPA2, que es más segura que la WEP, cambiar el nombre de nuestro router por uno cualquiera, para que no se pueda deducir nuestro operador y apagarlo si nos ausentamos muchos días, para que así no puedan intentar acceder a nuestra red wifi.
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